
NOVA EXPRESS
Daniela de la Torre desarrolla su práctica a través de diferentes medios - ilustración, performance, fotografía, - sin embargo, es el textil, uno de los soportes más nobles que le ha permitido desarrollar de manera DIY, (Do It Yourself), es decir, construyendo de manera manual y por cuenta propia las piezas en las que ha enfocado su producción más reciente. El textil es además el material que ha usado desde sus inicios como artista y que la une de forma significativa con saberes familiares, pues la conecta con su madre y su abuela, de quienes ha heredado el gusto por este quehacer.
Ese anclaje en lo textil convive con otro eje de su práctica: el análisis de la cultura pop, la relación entre la cultura de masas y la formación de la identidad del sujeto.
La cultura pop ocupa una parte central en el trabajo de Daniela y puede ser entendida como una voluntad de generar vínculos con los espectadores. La artista resignifica frases que encuentra en canciones, películas o en dichos populares, y que funcionan como espejos colectivos en los que nos confronta con nuestra identidad. Las frases - “Are you ready to get what you want?”, “I might fear pleasure but I’m ready to be scared”, y “How can one overcome the shame and guilt of needing help” funcionan como detonadores que revelan los distintos matices de un individuo frente al placer, la vulnerabilidad y la necesidad de conexión.
Además, en su obra Daniela se pregunta qué hace que una artista se convierta en artista. Para De la Torre, el deseo es uno de los motores principales: lo busca, lo reta, cuando éste parece escaparse, lo alcanza y finalmente se enfrenta a la vergüenza que puede traer consigo. En su trabajo, el deseo se muestra en una tensión constante y ambivalente: un impulso que atrae y asusta de la misma manera.
De la Torre usa el humor como herramienta principal para desafiar preceptos que surgen en forma de dudas y miedos. Con una maestría significativa, utiliza el humor a su favor para recordarnos que el estoicismo y la solemnidad no son garantía para comunicar un mensaje poderoso.
Las piezas que forman parte de esta muestra están hechas con pijamas y sábanas que pertenecieron a personas cercanas. Con ellas construye superficies con una gran variedad de patrones y formas que incluyen transfers fotográficos y por supuesto frases que forman parte de su cotidianidad. Daniela teje un discurso con recursos simples para hacer un comentario a la cultura de masas y la cultura del deseo a partir de objetos personales que evocan anhelos íntimos.
Otra parte fundamental de la práctica y de la identidad de la artista es el performance, en el que une los diferentes medios con los que trabaja. En las piezas que forman parte de esta muestra, hay gestos que aluden a esta disciplina, manos de maniquíes cubiertas de tela que agregan una dimensión corporal y escénica a las piezas. Cada pieza nos recuerda que, en su trabajo, la corporalidad y el gesto manual son inseparables porque tejen un puente entre lo performativo y lo textil. Más que técnicas, ambos son lenguajes que Daniela utiliza para relacionarse con el espectador, para explorar juntos, nuestros deseos y nuestras vulnerabilidades.
Maryann Díaz Ricardez
Curadora
